Ambiente y vida

Ambiente y vida

 

El hombre ha desarrollado a lo largo de la historia distintos ideales pero, a veces en su concreción, sólo piensa individualmente y no en los derechos de los demás.

Persigue la satisfacción de sus necesidades sin pensar tampoco en lo más importante para el desarrollo de su vida: el Planeta; la casa de todos.

Consciente del gran daño que le causa, no se da cuenta de que no es sólo el Planeta el que se perjudica, sino también la vida del resto de los seres humanos y de la naturaleza, la cual le brinda todos sus recursos para que pueda satisfacer sus necesidades y desarrollar su vida.

Al dañar el Planeta está destruyendo su propio hogar. Si el daño sigue, se producirá tal deterioro, que las generaciones futuras no podrán acceder al derecho de vivir en un mundo sano y equilibrado.

Por eso nos preguntamos:

¿Es posible el cuidado del Medio Ambiente?

Las personas toman los mismos datos de la realidad, pero llegan a conclusiones muy distintas. Esto sucede frente a este problema, genera discusiones acerca de lo que ha de hacerse y los recursos que se han de implementar para subsanarlos.

En nuestra sociedad podemos observar distintas actitudes:

La mayoría de las personas, especialmente de las sociedades ricas, poseen una Visión optimista ingenua, tienen una forma de actuar basada en el derroche, en la idea de que siempre habrá más de todo.

Así el que no controla el uso del agua y de la energía, los consumistas. Podemos decir, que aquí están también los que no se preocupan, los que no ven el problema o los que lo ven cuando los enfrentan al mismo.

También piensan que siempre seremos capaces de usar la tecnología para salvarnos de nosotros mismos. Por lo tanto, el "no se preocupen", es una de las actitudes de vida que manifiestan.

Para ellos, el ingenio humano y su poder sobre todo el resto de la naturaleza, siempre dará lugar a ideas y recursos de supervivencia.

En la forma de su actuar manifiestan que se sienten superiores y no necesitan de la naturaleza. Por eso hacen abuso de ella.

Con la perspectiva de que por medio de la ciencia y la tecnología siempre podremos conquistar, controlar y cambiar la naturaleza, para satisfacer nuestras necesidades y deseos en el presente como en el futuro.

Otros presentan una Visión pesimista, aquí el hombre conquista la naturaleza, consciente del daño, pensando que ya no hay nada por hacer y que en algún momento la naturaleza se volverá en contra de él. Poseen actitudes muy egoístas, las cuales se centran en la lucha del hombre contra el hombre en pos de la conquista de la supervivencia sobre el Planeta.

Un autor que se encuentra en esta postura es C.S. Lewis que sostiene que "cuando a la degradación ecológica se suma la desertización ética, los resultados no pueden ser sino éstos: la conquista del hombre por el hombre, el "acabemos con el hombre antes de que el hombre acabe con la naturaleza", la "abolición de lo humano" como anticipación del final, el "sálvese quien pueda".

Otro pensador, Asimov, constata que no existen civilizaciones avanzadas, porque todas acaban suicidándose.

A lo largo de este tiempo han surgido diversos grupos que hacen frente a las posturas anteriores ya mencionadas con una Visión ético – ambientalista, comprometidos en evitar el gran daño que el hombre le está haciendo al planeta y así salvarlo para que la vida humana pueda seguir existiendo. Un ejemplo muy importante de ello es el grupo ambientalista Greenpeace, que hace frente a los daños que se están produciendo.

Proclaman que el desarrollo industrial y tecnológico sin una adecuada política de preservación, como lo ha sido en las últimas décadas, debe revertir su impacto negativo sobre el ambiente.

La tala indiscriminada de las selvas vírgenes del Amazonas y de África Occidental, la disminución de la capa de ozono en el sur argentino, la deforestación, las consecuencias de la lluvia ácida, el recalentamiento global, la pérdida de la biodiversidad, la migración del campo a la ciudad, han deteriorado el planeta.

Es por ello que este grupo trabaja diariamente en pos de los problemas que van surgiendo en cuanto al medio ambiente, en cualquier lugar del mundo donde surjan.

Poseen la convicción de que hay exigencias universales de orden ético que tienen que ser reparadas y tenidas en cuenta.

Otros grupos son "Vida Silvestre", la Unión Mundial de Defensores de la Ecología y el Medio Ambiente (UNDEMA), los Partidos políticos ecologistas, los países asistentes a las Eco cumbres, los Eco clubes, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), entre otros.

Para ellos, la ciencia y la técnica no podrán resolver siempre los problemas que se plantean.

Por eso sería mejor pensar en algo que resulte, orientador y definitivo para encarar mundialmente la conservación y el consecuente cuidado de medio ambiente.

Randers y Meadows se expresan con categórica firmeza: "En el próximo futuro tendremos que decidir la base ética sobre la cual operar para utilizar lo imprescindible en un mundo con limites finitos".

Esto implica que en el futuro se racionarán los recursos disponibles. Expresando que el planeta estará tan deteriorado que habrá que utilizar lo mínimo para extender las posibilidades de vida.

Otros autores plantean una moral ecológica, que en sus bases es una moral de solidaridad de la especie; los bienes de la tierra son propiedad común de todos los habitantes; como son limitados y cada vez más escasos hay que administrarlos con criterios de justicia no sólo sincrónica (entre los contemporáneos de la misma generación), sino diacrónica (entre generaciones presentes y futuras).

Las personas con el concepto mundial de tierra sostenible afirman que la naturaleza existe para todas las especies terrestres vivas, no sólo para nosotros.

Este planteamiento centrado en la vida, ve a los seres humanos como parte de la naturaleza –y no aparte de ésta y no como conquistadores de ella-. Se refuerza esta hipótesis con el Principio de preservación del error perjudicial mínimo: Cuando alteramos la naturaleza para satisfacer lo que consideramos necesidades básicas o deseos básicos, debemos elegir el método que origine el menor daño posible a otros seres vivos para minimizar los daños. Cuando el daño no puede ser evitado, debe ser reducido al mínimo y reparado.

También actualmente, frente a la problemática ambiental se ha difundido la Visión judeo – cristiana. Hace entrar en juego un nuevo factor: el factor Dios. Se da una respuesta desde una perspectiva teocéntrica.

Nos ofrece el sentido del Planeta y la tarea del hombre en el mismo.

"Salida de bondad divina, la creación participa de esa bondad. Porque la creación es querida por Dios como un don dirigido al hombre, como una herencia que le es destinada y confiada". (Pto. 299 .Nuevo Catecismo de la Iglesia Católica).

"El orden y la armonía del mundo creado derivan de la diversidad de los seres y de las relaciones que entre ellos existen. El hombre las descubre progresivamente como leyes de la naturaleza que causan la admiración de los sabios.

La belleza de la creación refleja la infinita belleza del Creador. Debe inspirar el respeto y la sumisión de la inteligencia del hombre y de su voluntad". (Pto. 341. Nuevo Catecismo de la Iglesia Católica).

Dios hace al hombre partícipe de un dominio sobre la naturaleza, pero siempre sometido a El, con un espíritu de respeto y de responsabilidad. Dios creó la tierra para que nosotros seamos destinatarios de ella y así continuemos la obra creadora del Padre, por eso debemos cuidarla para que nuestros hermanos puedan disfrutar de ella, la reciban como herencia y también sea una vía de conocimiento de Dios.

El problema de la crisis ambiental, no es algo querido por Dios, es fruto de la libertad del hombre. En su origen vivía en total armonía con la creación, al desobedecer a Dios se inicia el desorden en la relación con la naturaleza.

En conclusión: ¿Es posible el cuidado del Medio Ambiente?

Conocer las distintas visiones de las posturas, me lleva a afirmar que es una obligación del hombre cuidar el medio ambiente, para que todas las personas podamos vivir acordes a nuestros derechos. Por eso es que debemos ser concientes del gran daño que le hacemos al planeta, para así controlar nuestros actos.

Tenemos que hacer posible cuidar el medio ambiente para que todo podamos disfrutar del planeta. Por lo cual no debemos tener pensamientos egoístas que solo se centren en nosotros mismos, sino en el bien de toda la humanidad.

Por ello propongo usar el corazón, la inteligencia y la conciencia para proteger nuestro común hogar y nuestras vidas.

Desde mi punto de vista cuidar el medio ambiente es gozar de un mundo mejor. Es el derecho a vivir en un clima apto para el desarrollo humano, en el que la búsqueda de la satisfacción a las necesidades actuales, no comprometa la vida de generaciones futuras.

Conservar el medio ambiente en óptimas condiciones no debe ser una utopía sino un desafío para toda la humanidad.